Áteme, mi Señor. Áteme el cuerpo con Sus manos, Su cinturón, o con cadenas.
Áteme, mi Amo. Con suavidad o con firmeza para azotarme, follarme o simplemente observarme.
Áteme, mi Dios. Pero ate mi cuerpo, porque mi mente ya está fuertemente atada a Usted.
Suya siempre,
M

No hay comentarios:
Publicar un comentario