Entro para decirle que me está costando cumplir con mi nuevo límite de tabaco. Pero lo estoy haciendo. No fumo más de diez cigarrillos al día, aunque me cueste y me suba por las paredes, mi Señor.
También quiero decirle una vez más lo mucho que le deseo, mi Amo. Le necesito cada día que pasa más.
Debe saber, que en mi mente está todo el día jugando conmigo. Y yo le beso los pies agradecida.
Buenas noches, mi Amo.
Su esclava,
M

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