Falta muy poco ya, mi Señor.
Menos de lo que parece.
Deseo cerrar mis ojos hoy y que al volver a abrirlos esté Usted delante, mi Amo. Y yo a sus pies.
Y Usted con mi correa en Su mano, porque no ha de ser de otra manera.
Le pertenezco por completo, mi Señor.
Le deseo y deseo por encima de todas las cosas volver a disfrutar del hecho de ser suya.
Su esclava,
M

No hay comentarios:
Publicar un comentario